INVERSIÓN MINERA Y EN INFRAESTRUCTURA IMPULSARÁ EXPANSIÓN ECONÓMICA
El Ejecutivo aprobó el Marco
Macroeconómico Multianual (MMM) 2025-2028, en la sesión del Consejo de Ministros
del 21 de agosto del presente año. Se trata de un documento guía que contiene
las proyecciones macroeconómicas multianuales oficiales, tomando como base el
análisis del entorno global y local. El informe elaborado por el Ministerio de
Economía y Finanzas (MEF) "proyecta que el crecimiento económico para 2024
y 2025 estará sostenido por el mayor dinamismo de la demanda interna, asociada
a las mayores inversiones y la mejora del consumo privado en un entorno de baja
inflación, condiciones de financiamiento favorables y la consolidación de la
mejora de las expectativas de los agentes económicos”. Asimismo, destaca
"un mayor crecimiento de la inversión privada", la cual alcanzaría
una tasa promedio de expansión de 3.2%, impulsada por la inversión en la construcción
de nuevos proyectos mineros "en un escenario de mejoras normativas
promovidas para la exploración”. ( El Peruano Pág.
8-9 )
INSEGURIDAD
GENERA MÁS GASTOS PARA EMPRESAS
Es que la inseguridad y
criminalidad no es algo que solo afecte al peruano de a pie, sino también a
cientos de micro, pequeñas, medianas y grandes empresas que quieren salir
adelante dando trabajo a más personas. Robos, ataques, extorsiones son solo
algunos actos delincuenciales que tienen que afrontar los negocios, sin
importar su tamaño, facturación, cantidad de trabajadores, ubicación o sector
al cual se dirigen. Hoy, estas empresas que quieren sobrevivir solamente tienen
como opción destinar más recursos para cubrirse de este flagelo, ya sea
accediendo al pago de cupos, ya sea contratando seguridad, colocando cámaras,
rejas, y alarmas. Todo vale cuando lo que se busca es resguardar un patrimonio
y hasta la propia vida. Una minera, según se conoció, puede gastar entre US$35
millones y US$100 millones al año para evitar ser víctima de actos vandálicos o
de mineros ilegales que solo quieren despojarlos del territorio donde operan,
con la finalidad de apoderarse de los recursos y sin generar ingresos para el
país. Dichos montos son destinados a personal de seguridad, traslados,
equipamiento y sistemas que buscan evitar ataques y robos. ( Perú 21, Pág. 12 )