ATAQUE A MINERA FUE UN ACTO TERRORISTA
El presidente de la Sociedad
Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Víctor Gobitz, calificó como
un acto terrorista el atentado que sufrió la minera Poderosa contra una torre
de alta tensión en la localidad de Santa Rosa de Zancobamba, distrito de Chugay
en la provincia de Sánchez Carrión en La Libertad. ( La Razón, Pág. 8 )
IMPULSARÁN POTENCIAL
COMUNITARIO
La minería puede generar
grandes oportunidades de desarrollo a favor de la agricultura, mediante una
convivencia armónica que permita fortalecer capacidades y posibilidades de
crecimiento en las comunidades, destacó el titular del Ministerio de Energía y
Minas (Minem), Rómulo Mucho. ( El Peruano, Pág. 11 )
PERÚ Y EE.UU. PROMOVERÁN
INVERSIONES
Perú y Estados Unidos
acordaron promover inversiones en el sector minero peruano y reiteraron su
compromiso de ampliar las inversiones, fortalecer el comercio e intercambios
comerciales entre emprendedores de ambos países. La declaración conjunta fue
difundida por los gobiernos de Estados Unidos de América y del Perú, con
ocasión del Primer Diálogo de Alto Nivel Perú-Estados Unidos, efectuado el 9 de
mayo en Washington D.C. ( El Peruano, Pág. 3 )
PRECIO ALTO DEL ORO ATRAE A
LAS ACTIVIDADES ILÍCITAS
El director fundador de
V&C Analistas, Dante Vera, señaló que el 40% de la producción de oro tiene
origen en la minería no formal (entre informales e ilegales). Así lo expuso durante
el Jueves Minero denominado "Problemática de la minería a pequeña
escala", que organizó el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).
"Un 40% de la producción anual del oro está en manos de los mineros no
formales. Las estadísticas no distinguen entre el minero informal y el ilegal.
Calculamos que ese porcentaje de producción anual de oro significa
aproximadamente US$4 mil millones anuales, pero si consideramos otros costos
indirectos, sumaría fácilmente hasta US$8 mil millones anuales", precisó. (
Correo, Pág. 12 )
EL GRAN SALTO
Por Jaime de Althaus. Hace dos sábados se llevó a cabo en Chala una cumbre de mineros informales a la que asistieron alrededor de 7.000 mineros para discutir la problemática y demandar una ley de minería pequeña y artesanal que les permita formalizarse. El asunto es de máxima importancia porque, como se sabe, el Reinfo, que es usado como patente de corso por mineros ilegales para que la policía no pueda incautar ni siquiera el oro robado, vence el 31 de diciembre. Entonces es de alta necesidad producir antes de esa fecha un plan serio y realista de formalización para que no se vuelva a prorrogar ese instrumento nocivo. Por supuesto, la intensidad de la demanda y la cantidad de personas dedicadas a esta actividad convierten a este sector en un interesante bolsón electoral. Por eso asistieron al evento líderes políticos de tendencias incluso opuestas. Estuvo, por ejemplo, Rafael Belaunde Llosa, de Libertad Popular, que tiene una propuesta de formalización, pero también acudió Guido Bellido, que ya lanzó su candidatura presidencial. Iván Arenas ha hecho notar en “Perú 21? que llama la atención que, siendo los mineros informales capitalistas populares, Guido Bellido, que es comunista ortodoxo, pretenda representarlos. Antauro Humala no estuvo, pero no pierde oportunidad de defender a quienes llama los mineros ‘nativos’ frente a la gran minería transnacional. Bellido y otros azuzan la idea de que los informales no se pueden formalizar porque la mediana y la gran minería se oponen. Es decir, incitan a la lucha de clases, cuando en realidad estamos hablando de pequeños empresarios que quisieran efectivamente crecer en la economía legal. ( El Comercio, Pág. 22 )
EL PERÚ, PAÍS MINERO
Por Fernando Veria,
estudiante de Derecho Corporativo. El reciente ataque a la compañía minera
Poderosa representa un condenable acto criminal y, además, devela un complejo
problema que involucra no solo a delincuentes, sino también al mismo Estado,
que hoy parece ser el aliado ideal de la minería ilegal. La reciente derogación
del Decreto Legislativo 1607 se presenta como el ejemplo perfecto de una
aparente complicidad. Con ello se consolidó la impunidad de un sector que
acarrea consigo un entorno de criminalidad que va más allá de la mera
extracción de mineral. Queda claro que la formalización minera iniciada en el
2012 ha fracasado. El Reinfo se presenta hoy como una herramienta basada en
trámites obsoletos que no ofrece incentivos reales para la formalización y que,
por el contrario, parece perpetuar la actividad minera ilegal. Esto crea
lamentablemente una perspectiva poco favorable para el sector. ( El Comercio,
Pág. 21 )