MINEM PIDE DECLARAR EN EMERGENCIA LA FORMALIZACIÓN MINERA
Rómulo Mucho, ministro de
Energía y Minas, manifestó la urgencia de declarar en estado de emergencia la
formalización minera en el país. Esto ocurre luego de que un grupo de mineros
ilegales, en complicidad con delincuentes, detonaran dos torres de alta tensión
pertenecientes a la minera Poderosa, en Pataz, La Libertad, en pleno estado de
emergencia. Este violento acto es el último de una serie de ataques similares
en minas de Pataz que han dejado fallecidos, heridos y daños materiales. El
Ministerio del Ambiente ha anunciado que llevará a cabo una revisión exhaustiva
del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), en respuesta a la
creciente complejidad del tema de la formalización minera. ( El Comercio, Pág.
17 ) ( Correo, Pág. 4 )
LAS INOCUAS ACCIONES CONTRA
EL CRIMEN EN LA ZONA MINERA DE PATAZ
El crimen organizado
asociado a la minería ilegal sigue causando daño en el Perú ante la pasividad
de las autoridades. Alarmantes, pero previsibles son los constantes atentados
en las zonas de concesiones mineras. El último de ellos ocurrió la noche del
jueves 4 de abril en la minera Poderosa, específicamente en el centro poblado
Pueblo Nuevo, anexo Santa María, en el distrito y provincia de Pataz, región La
Libertad, donde derribaron dos torres de alta tensión y asesinaron a un
trabajador de la compañía. Estos acontecimientos no hacen más que confirmar que
la derogatoria del decreto legislativo 1607 por parte del Congreso y promulgada
por el Ejecutivo fue nefasta, al quitar a la Policía la facultad de decomisar
material explosivo. Igual de mala que la decisión del Gobierno de imponer
estados de emergencia sin estrategia alguna. ¿Por qué no se logra frenar la
criminalidad en las zonas mineras? ¿Son inocuos los esfuerzos? Carlos Gálvez,
expresidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE),
opinó que declarar estados de emergencia "es un canto de sirena”. ( Perú
21, Pág. 2 )
EL MINAM RECHAZA ATAQUE
CONTRA PODEROSA
El ministro de Energía y
Minas, Rómulo Mucho, expresó su profundo rechazo frente a lo sucedido el último
4 de abril contra la minera Poderosa, donde mineros ilegales, en coordinación
con organizaciones criminales, derribaron dos torres de alta tensión con el fin
de afectar la operatividad de la unidad minera. Sostuvo que hay un comando
unificado del ejército con la Policía con cerca de 300 efectivos y más de 1,000
personas resguardando la seguridad de la empresa minera aurífera. ( El Peruano,
Pág. 11 )
EJÉRCITO SOLO INTERVINO 25
DE 450 BOCAMINAS ILEGALES
El ataque del último jueves
a la minera Poderosa en la provincia liberteña de Pataz ha puesto en entredicho
la efectividad del estado de emergencia, al grado de que Pablo de la Flor,
representante de la empresa, aseguró que el Ejército solo ha intervenido 25 de
las 450 bocaminas ilegales identificadas en la zona. Detalló que, en los
últimos dos meses, las fuerzas del orden solo intervinieron el 5% de estas
mafias organizadas. Agregó que, gracias al sistema de georreferenciación, unas
44 plantas ilegales pudieron ser identificadas en Pataz, de las cuales solo 4
fueron intervenidas. ( República, Pág. 29 ) ( Correo, Pág. 18 )
MINEROS ARTESANALES BUSCAN
FORMALIZARSE
El especialista en temas de
terrorismo, Pedro Yaranga, aclaró que el reciente ataque cerca de la minera
Poderosa, en Pataz, es el resultado de un conflicto social entre dicha compañía
con comuneros de la zona, entre estos mineros artesanales que buscan la
formalización. "Es un problema social de un sector de los mineros
informales, que en las condiciones como está va a ser poco probable que se
solucione. Ahí tiene que haber una intervención en el tema de la formalización
de los mineros artesanales. La minera los trata de ilegales cuando no lo son,
en realidad esos mineros artesanales son los dueños de todos esos cerros",
contó Yaranga a EXPRESO. ( Expreso, Pág. 8 )
MINERÍA, VIOLENCIA E
IMPUNIDAD
En ocasiones, los criminales
pueden lograr sorprender al Estado con atentados difíciles de prevenir. Frente
a estos casos no se puede hacer mucho más que reaccionar de forma rápida,
atender a las víctimas y llevar a los responsables a la justicia. En otras
ocasiones, sin embargo, es posible prever con algún nivel de certeza dónde
podría venir el siguiente ataque y de qué naturaleza será. En tales
circunstancias, la disuasión y prevención son la prioridad total. En Pataz, La Libertad,
este razonamiento cae en saco roto. Esta semana, delincuentes dinamitaron dos
torres de alta tensión que alimentaban de energía las instalaciones de la mina
Poderosa. Sin electricidad, los mineros ilegales entran al socavón con mayor
facilidad para extraer oro. Un trabajador falleció y dos quedaron heridos de
bala. Como se recuerda, este no es, ni de cerca, el primer atentado en la zona.
( El Comercio, Pág. 2 )
