MICHIQUILLAY PODRÍA SER UN
'PUNTO DE QUIEBRE' PARA LA MINERÍA NACIONAL
Pasaron 61 años para que
el proyecto de cobre Michiquillay (Cajamarca) sea puesto en valor y comience el
esperado camino para operar.Tras vencer el último 20 de febrero la licitación
internacional por el yacimiento, Óscar González Rocha, presidente ejecutivo de
Southern Copper, comenta a Gestión que la empresa hará todo lo necesario para
iniciar la puesta en marcha de esta operación de US$ 2,500 millones lo antes
posible. "Sabemos que el desarrollo de un proyecto es un proceso que
tomará el tiempo que corresponda.De lo que se trata es que todos estemos
satisfechos con el proyecto, los trabajadores, pobladores, autoridades y el
Gobierno central", asegura. Dentro de las etapas a seguir en Michiquillay,
González Rocha señala que tras su adquisición, el siguiente paso será conformar
el equipo que se hará cargo de todo lo conducente para poner el proyecto en
operación.Por su parte, Juan Luis Kruger, vicepresidente de la SNMPE, calificó
la relevancia de Michiquillay como "un punto de quiebre en la inversión
minera en el país, pues se trata - añadió- de un proyecto de talla
mundial". El ejecutivo sostuvo que cuando la minera opere se puede elevar
entre 10% y 15% la producción de cobre en el país.Pero no solo es ese el
impacto, pues refirió que se trata de un primer paso para desarrollar otros
proyectos mineros, en especial cupríferos, en la zona norte. "Es un punto
de inflexión en lo que puede ser la historia minera del Perú", apuntó. (
Gestión Pág. 4 Supl. Minera )